Evaluación 360 grados

La evaluación 360 grados se basa en la percepción del desempeño de una persona desde varias perspectivas relevantes  a diferencia de la tradicional evaluación jefe/colaborador que sólo tiene en cuenta el punto de vista del jefe.
Está claro que la mayoría de las personas desempeñan varios roles en su actividad profesional. Por ejemplo, un individuo puede actuar como jefe de un departamento, como miembro de uno o varios equipos, como negociador con los proveedores, como experto asesor de la dirección, además de tener que coordinar su actividad con otros departamentos para cumplir la planificación de la producción.
La evaluación única realizada por el superior jerárquico sería claramente parcial e incompleta.
La Evaluación 360 grados obtiene el "feedback" de las personas o grupos directamente afectados por la actividad profesional de la persona evaluada. Por ejemplo, los componentes de un equipo pueden evaluar la contribución y competencias de cada uno de sus miembros;  los clientes internos - otros departamentos o colegas - pueden evaluar la calidad de los servicios prestados por el interesado; los proveedores o colegas pueden evaluar su capacidad de planificación y coordinación. Sus colaboradores pueden opinar sobre sus competencias y habilidades como jefe.
Las herramientas y procedimientos adecuados en manos de expertos profesionales garantizan la validez y utilidad de este sistema.